El 14 de julio de este año, un hombre perteneciente a una comunidad originaria y padre de una niña recién nacida denunció que su hija no estaba en la sala de Maternidad del Hospital Zonal Presidente Perón de Tartagal. La menor fue encontrada casi 24 horas después por un vecino que escuchó su llanto en un baldío ubicado a seis cuadras del nosocomio.
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El 14 de julio de este año, un hombre perteneciente a una comunidad originaria y padre de una niña recién nacida denunció que su hija no estaba en la sala de Maternidad del Hospital Zonal Presidente Perón de Tartagal. La menor fue encontrada casi 24 horas después por un vecino que escuchó su llanto en un baldío ubicado a seis cuadras del nosocomio.
En el marco de la causa, se imputó a una mujer wichi de 25 años llamada Andrea Roxana Pérez acusada del delito de sustracción de persona menor de edad.
La misma consiguió días atrás el beneficio de la prisión domiciliaria por pedido de su defensa y quedó detenida dentro de su comunidad. Sin embargo, dos de los tres integrantes de la Unidad Fiscal de Investigación apelaron esta decisión y pidieron prisión preventiva en cárcel común para Pérez.
A pesar de esto, este viernes el juez de Garantías 2 de Tartagal, Fernando Mariscal Astigueta, declaró inadmisible el recurso de apelación interpuesto por dos de los tres integrantes de la Unidad Fiscal de Investigación (UFI) creada en el Legajo de Investigación 52/23.
El rechazo de la apelación se da básicamente por la falta de cumplimiento de un requisito formal, por lo que la acusada seguirá con prisión domiciliaria.