LaLiga

Mayoral rescata un punto para el Levante en Anoeta

Actualizado

Januzai, derribado en falta por Chema, el viernes en Anoeta. Juan Herrero EFE

Hay empates que son peores que muchas derrotas, puntos que no son capaces de mitigar el regusto amargo de haber perdido una oportunidad pintiparada para sumar tres. No se podrá explicar la Real Sociedad cómo fue capaz de no ganar su partido de este viernes contra el Levante, al que tuvo a su entera merced, casi suplicando clemencia durante una parte entera, para acabar arrancando un punto de Anoeta. [Narración y estadísticas (1-1)]

En lo que ya es un clásico en San Sebastián, la Real ha encallado cuando se la ha presentado la oportunidad de encaramarse a los puntos europeos. Encadenó 10 encuentros sin perder tras la llegada al banquillo de Imanol Alguacil y ahora suma un punto en tres jornadas, aderezados con sensaciones negativas y la intuición, aún subsanable, que este será otro final de temporada insípido, sin absolutamente nada en juego.

El Levante llegó al descanso con un remate a puerta, sin provocar un solo córner ni un fuera de juego y con apenas un 35% de posesión del balón, que rondaba el 25% en el minuto 40. Esos cinco minutos finales, de hecho, maquillaron el esperpento granota. Es difícil recordar un partido de Liga en el que un equipo ofreciera una imagen tan desastrosa, tan extraordinariamente pobre. Acabar el primer tiempo con solo un gol en contra fue la mejor noticia para el equipo de Paco López.

Comiendo terreno

La Real Sociedad pudo haber dejado sentenciado el partido al descanso, pero le faltó pegada para hacerlo. Un día más, la ausencia de Willian José lastró demasiado al conjunto donostiarra. La profundidad que aportaban Theo y Januzaj se sumaban a la clarividencia de Oyarzabal y la llegada de Mikel Merino, pero faltaba la pieza más importante para completar el puzle, la del remate. Sandro, seco desde hace año y medio, pasó otra noche de vigilia.

Januzaj, que tampoco había marcado en toda la Liga (sí en Copa), sí fue capaz de cambiar su destino. Oyarzabal abrió para Theo, el francés alcanzó la línea de fondo y colocó un centro raso perfecto que el extremo belga envió con violencia al fondo de la portería de Aitor, sin que el guardameta guipuzcoano pudiera hacer nada para evitarlo.

No matar al Levante cuando puedo fue un pecado mortal para los de Alguacil. Su rival fue mejorando en la segunda parte (era casi imposible no hacerlo) y le fue comiendo terreno a los locales. Januzaj y Merino se apagaron y todo quedó fiado al entendimiento entre Oyarzabal y Theo. Pero ya no iba a ser tan fácil, porque el Levante cuidaba más el balón y llegaba al área contraria.

Sólo un cambio de Alguacil

También se exponía más, claro, y eso generó ocasiones en las dos porterías. Oyarzabal y Sandro fallaron una doble ocasión al comienzo, después Rochina casi marca un gol olímpico, falló de nuevo Sandro, después Luna... Era cuestión de tiempo que alguien acertara con la portería y ese fue Borja Mayoral, en un córner ensayado que el canterano del Madrid definió con un disparo raso.

Sin saber muy bien cómo, la Real se dio cuenta de que le habían empatado el partido y le entraron las prisas. Aunque Alguacil, inexplicablemente, no hizo más cambio que el de Bautista (que tuvo una clarísima antes del empate) por Sandro. Simon y Oyarzabal estuvieron cerca de ser los héroes de sus equipos y en el descuento la Real fue incapaz de salir victoriosa en una maraña de piernas en el área. La sensación de oportunidad perdida invadió Anoeta antes de un parón que se presume largo en San Sebastián.

Conforme a los criterios deThe Trust Project

Saber más

Comentarios

Esta noticia aún no tiene comentarios
Sea el primero en dar su opinión