El ex presidente de BBVA Francisco González ha decidido abandonar "temporalmente" los cargos en la Fundación y en el banco mientras concluyen las investigaciones en curso sobre el caso Villarejo "y para evitar que se utilice su persona para dañar a la entidad".
En una carta remitida al presidente del banco a la que ha tenido acceso Europa Press, Carlos Torres, González se muestra convencido de que su decisión "ayudará a entender con qué rigor, falta de interés personal y compromiso hemos trabajado durante tanto tiempo". Fuentes oficiales de la entidad no comentaron el contenido de la carta, desvinculándose de su divulgación.
González, que pide a su sucesor que traslade la carta al consejo de administración con todo su "afecto y gratitud", señala que desde hace un año han "sufrido una larga y continua agresión mediática derivada de las investigaciones policial y judicial, sobre un caso de gran repercusión periodística en torno a un excomisario de policía y su trabajo al frente de una empresa de investigación contratada en su día por el banco".
El ex presidente de BBVA señala que en junio del año pasado, tras conocerse a través de distintas informaciones periodísticas la contratación de los servicios del comisario José Manuel Villarejo, "impulsé la investigación interna" para averiguar el alcance de estos contratos así como su importe y duración. González asegura a su sucesor y al consejo de administración de la entidad que presidió durante dos decenios que su intención fue asegurarse de que "el banco había actuado de acuerdo con sus principios de legalidad y publicidad".
La renuncia se produce en vísperas de la primera junta general de accionistas del banco en Bilbao sin el propio González como presidente y en pleno proceso de investigación por parte de la Audiencia Nacional sobre el espionaje llevado a cabo en 2004 y 2005 por Villarejo al Gobierno, organismos reguladores y a diversas empresas con conocimiento del ex presidente de BBVA. El servicio, que respondía al intento de tomar el control del banco, por un grupo de inversores capitaneados por la constructora Sacyr, incluyó pinchazos de hasta 4.000 números telefónicos.
Tras la salida de González de la presidencia ejecutiva el pasado mes de diciembre, el banco anunció la investigación iniciada y González pasó a ser presidente de la Fundación de la entidad. Todos estos ingredientes sumados a la gran animadversión que despierta el ejecutivo en Bilbao a cuenta de la salida en 2001 de los consejeros que procedían de BBV en el banco auguraban hoy un tormentoso estreno de Carlos Torres ante los accionistas de la entidad.
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