Yoshi’s Crafted World, rejugabilidad 2.5D en un mundo lleno de coleccionables
Siempre apetece repetir un camino si el trayecto lo merece. Esa máxima, que no extraigo de ningún lado, me parece una regla insalvable para cualquier plataformas 2D que se preste a ser bueno. Debes querer volver, ya sea porque te has dejado cosas en tu primer viaje o, en su defecto, porque desde el estudio de desarrollo quieren darle una vuelta de tuerca más al escenario. Y eso es algo que Yoshi’s Crafted World apunta a saber hacer de maravilla.
Lo bueno es que a Nintendo le basta con un nivel para demostrar lo dicho. La demo lanzada en la eShop justo después del último Direct no tiene más que eso, pero está exprimida tan bien que se sirve de un único circuito para ofrecer una idea bastante clara de lo que llegará con el juego, y no es poco. Yoshi’s Crafted World será un título bastante generoso con la rejugabilidad, los coleccionables y demás, y lo será de una manera 100% Nintendo. Esa en la que vuelves pero no juegas a lo mismo.
A falta de saber si pasará con cada pantalla, es razonable asumir que la gran mayoría contarán con dos versiones: anverso y reverso. La primera vendría a ser el trayecto tradicional, mientras que la segunda se reproduce, como imaginaréis, al revés, desde la meta hasta el principio. Además, en ellas habrá que recoger varios tipos de coleccionables: flores, corazones y monedas rojas. Y cuando todo eso esté, sin ser poco, también habrá NPC’s que nos pedirán volver a buscar ciertos objetos, como ocurre con las vacas de la demo.
Todos estos incentivos animan a revisitar los niveles, que ya de por sí entran por los ojos (son mundos de cartón que parecen juguetes) y resultan interesantes por estar bien diseñados. Y es que en Yoshi’s Crafted World no solo avanzas de derecha a izquierda, se utiliza la profundidad para dividir la ruta (incluso se simula el 3D) y puedes voltear por completo algunas pantallas, siempre en pos de favorecer la sensación de estar explorando y descubriendo nuevas cosas.
No hay que olvidar que hablamos de un plataformas horizontal, pero nuestro protagonista se las ingenia para que concibamos sus mundos como entornos multicapa. Al igual que en Captain Toad: Treasure Tracker, cada nivel de Yoshi’s Crafted World es un sitio al que volver, un lugar que se ha creado y reformulado después para explorar sus posibilidades, y queda menos de un mes y medio para sepamos hasta dónde han sido capaces de expandirlas. Lo cierto es que tras la demo, hay más ganas que nunca.
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