Trípoli. (Europa Press).- El viceministro de Exteriores de Libia, Jaled Kaim, ha advertido de que la intención de Estados Unidos de desbloquear los fondos congelados al Gobierno libio para entregárselos a los rebeldes sería un acto de piratería. "Cualquier uso de los fondos bloqueados es como la piratería en los mares. Esto es ilegal y si permanecemos en silencio, creo que acabaremos viviendo en una jungla", ha dicho Kaim a la prensa internacional.
En este sentido ha argumentado que los rebeldes "no son una entidad legal, no son un país", ya que un territorio solo puede quedar dividido mediante un referéndum o una resolución de Naciones Unidas, que en el caso de Libia no se han producido.
Esta es la respuesta a la secretaria de Estado, Hillary Clinton, que ayer adelantó que la administración norteamericana está preparando una legislación para permitir que los 30.000 millones de dólares (20.600 millones de euros) que el país ha congelado al régimen de Muamar Gadafi puedan ser entregados al pueblo libio, aunque no está claro si directamente a los rebeldes.
En la misma línea, Kaim ha advertido de que la intención de los países miembros del Grupo de Contacto para Libia, que se reunieron el miércoles en Roma, de crear un fondo para financiar a los rebeldes podría desalentar a otros países de la región a invertir en el extranjero, por miedo a que sus activos sean bloqueados y entregados a grupos insurgentes.
Además el viceministro ha denunciado la desaparición de una partida de 700 millones de dinares (403 millones de euros) del Banco Central de Libia que fueron transferidos en febrero, cuando estallaron las revueltas, a Benghazi para el pago de salarios. "¿En qué se han gastado esos millones?, ¿En armar a los rebeldes o en dividirlos entre los nueve miembros de su Consejo?, ha cuestionado.
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