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Un alumno aventajado da el salto a la escuela de negocios de Yale

El donostiarra Pablo Polzer, con 18 años, es el único europeo recién graduado que ha sido admitido en el MBA de la universidad estadounidense

Pablo Polzer, estudiante que hará el MBA de Yale, posa en la biblioteca de la UPV en San Sebastián.
Pablo Polzer, estudiante que hará el MBA de Yale, posa en la biblioteca de la UPV en San Sebastián.JAVIER HERNÁNDEZ
Mikel Ormazabal

La Universidad de Leeds (Inglaterra), una de las más prestigiosas de Europa, le ha graduado con un “sobresaliente con honores”. No cabe una puntuación más alta. Pablo Polzer Lecuona, un donostiarra de 18 años con un expediente académico apabullante, ha sido admitido ahora en la Universidad de Yale (EE UU) para hacer un MBA (Máster en Administración de Empresas) que está al alcance de muy pocos. Él es el único europeo recién graduado que la citada universidad ha admitido este año en su máster; al resto les exigen una experiencia laboral de al menos dos años.

Pablo Polzer siempre ha sacado muy buenas notas, pero no pensaba que algún día podría figurar entre los 17 únicos estudiantes del mundo seleccionados para incorporarse a la escuela de negocios de Yale, reconocida por formar a futuros líderes mundiales de la política y de los negocios. Tiene una mente privilegiada, pero prefiere quedarse con que “se puede conseguir todo lo que uno se propone con esfuerzo, dedicación y constancia”.

Estudió en el colegio inglés San Patricio de San Sebastián hasta los 13 años, saltó dos cursos para terminar la ESO y con solo 15 años cursó el Bachillerato Internacional en un centro de Sotogrande (Cádiz), uno de los más selectos de España. No había cumplido los 16 cuando ingresó en la Universidad de Leeds, donde acaba de lograr el doble grado en Relaciones Internacionales y Sociología. El español, alemán y euskera son sus lenguas maternas, domina a la perfección el inglés y tiene conocimientos de francés y chino.

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Con 10 y 11 años sus padres le enviaban a EE UU al programa CTY de la Universidad Johns Hopkings (Baltimore) para niños con altas capacidades. “Desde muy pequeño le ha divertido estudiar y siempre ha sido muy curioso. Devoraba periódicos como The Finantial Times, el Süddeutsche o el Frankfurter Allgemeine Zeitung”, afirma su madre Leyre.

Para que Yale, en el top 10 de las universidades del mundo, le haya aceptado como silver scholar, Polzer tuvo que enviar un formulario con su expediente académico, un texto de su puño y letra sobre sus aficiones, pasar una entrevista personal “por Skype” y superar el examen de acceso GMAT, una prueba “durísima” en la que obtuvo 760 puntos sobre un máximo de 780, muy por encima de la media.

“El GMAT evalúa los conocimientos de matemáticas y de inglés. Te colocan delante de un ordenador en un cubículo muy pequeño mientras una cámara vigila todos tus movimientos. Ponen a prueba tu capacidad y rapidez para resolver problemas prácticos en un tiempo escaso, bajo mucha presión”, explica Polzer. Dedicó un mes a prepararse para este examen, cuando lo normal es prepararse durante seis meses. “Él tenía muy claro que quería entrar en Yale y se esforzó una barbaridad. El verano pasado hizo las prácticas de la carrera en Daimler —la empresa madre de Mercedes— en Stuttgart. Trabajaba ocho horas diarias y después dedicaba otras seis horas a estudiar para preparar el GMAT”, cuenta su madre.

Yale pasa tres rondas para elegir a sus aspirantes a la escuela de negocios. Polzer ya fue aceptado en la primera, superando a “otros que llevaban varios años trabajando, por ejemplo en Google”. A finales de noviembre pasado, la directora de admisiones de la universidad estadounidense le llamó personalmente para comunicarle que había sido aceptado y que le esperaban el próximo curso. Los responsables del examen quedaron sorprendidos con sus resultados en matemáticas, una asignatura que no había estudiado durante su carrera en Leeds y en la que quedó incluso “por delante del 99% de los presentados”, dice Leyre Lecuona.

El Máster de Yale tiene un coste de 60.000 euros. “Es demasiado alto”, reconoce la madre, “inasumible para una familia normal, pero en Yale nos dijeron que el dinero no podía ser un inconveniente para acceder al MBA. De hecho, nos han ayudado económicamente. Si ellos te quieren, ponen de su parte para que acudas”. Polzer había recibido la invitación de la London English School para hacer un Master in Management, pero la rechazó para dar un salto a Yale.

El joven, que en su etapa universitaria en Inglaterra tenía que pedir autorización para comprar un destornillador por ser menor de edad, tiene previsto ir a Connecticut (EE UU) a finales de este mes para recibir sendos cursos sobre finanzas y de Excel, antes de comenzar el MBA el día 9 de agosto. Polzer, mentor de un niño de la parte kurda de Irak, no sabe aún a qué quiere dedicarse profesionalmente, dice estar “abierto a todo”, pero admite que le gusta “el mundo de la consultoría y la estrategia”. “Algún día querría montar mi propia empresa”, afirma.

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Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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