En Fórmula 1 no hay milagros, sino trabajo y dinero, además de talento. Y a Mercedes este año parecen estarle pagando con la misma moneda que ha empleado las últimas cuatro temporadas para aplastar a sus rivales: una buena idea, que bordee el reglamento sin ser ilegal y que los alemanes parecen no estar pudiendo contrarrestar.
No es fácil de explicar, como nada lo es en F1 y la puede estar explotando Ferrari, que está siendo superior en las primeras carreras. La bajada del alerón trasero 15 cm este año ha hecho perder agarre a los coches y soplarle, dotarle de vida, está siendo vital para su estabilidad. Renault forzó los 5 cm de inclinación de la salida del escape hasta el tope para ello. Por eso la FIA no permite a los monoplazas cambiar un mapa motor para soplar por el escape directamente al alerón trasero, pero los equipos tienen muchos recursos. "Siempre van delante, varios cuerpos", reconoce un comisario a MARCA en Montmeló.
También está prohibida la combustión permanente incluso cuando los pilotos van a medio gas, o sin apretar el acelerador, para seguir generando gases. Así que varios equipos, Ferrari al frente, habrían encontrado el hueco para colar una genialidad, que a baja velocidad, la turbina opere con electricidad y sople aire sin combustión a través de los cilindros. También funcionaría en aceleración. Lo cuenta Auto motor und sport, donde se habrían desahogado sus compatriotas de Mercedes. Creen que es contraria al espíritu del reglamento, pero la FIA valora que si es así, no es ilegal.