Luego de más de dos décadas de la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) entre México, Estados Unidos y Canadá, iniciaron este miércoles el proceso de modernización de este plan.
Esta primera discusión se extenderá cinco días en un hotel de Washington. La segunda ronda tendrá lugar en México y la tercera en Canadá en algún momento del invierno.
#EnVivo/ Conferencia de prensa con motivo del inicio de las negociaciones para la modernización del #TLCAN ?????? https://t.co/jrJahisNoX pic.twitter.com/MvWeOUIT0w
— SE México (@SE_mx) 16 de agosto de 2017
El banderazo de salida estuvo a cargo del representante comercial de la Casa Blanca, Robert Lighthizer, quien sostuvo que el presidente Donald Trump quiere una “mejora mayor” del TLCAN y no sólo “retoques”, pues señaló que ha provocado el desplazamiento de más de 700 mil empleos estadounidenses y déficits comerciales crónicos con México y Canadá.
Lighthizer advirtió en ese sentido que los negociadores de los tres países enfrentan el “gran reto” de hacer que la modernización del TLCAN resulte en beneficios para las tres naciones.
“(Trump) no esta interesando en el retoque de algunas disposiciones y en la actualización de algunos capítulos, sentimos que el TLCAN le ha fallado a muchos estadunidenses y requiere una mejora mayor”, indicó.
Lighthizer seńaló que por ellos sus objetivos son frenar los deficits comerciales con reciprocidad y reglas de origen, en especial en el sector automotriz, con más contenido regional y contenido sustancialmente mayor de Estados Unidos.
Asimismo indicó que las disposiciones laborales deben estar dentro del acuerdo y ser lo más fuertes posibles, además de evitar la manipulación de divisas y un mecanismo de resolución de disputas diseñado para respetar la soberanía y el proceso democrático.
El secretario mexicano de Economía, Ildefonso Guajardo, celebró la importancia del acuerdo y aseguró que no sólo ha sido exitoso para incrementar los flujos comerciales sino para crear la plataforma de una “visión común” en América del Norte.
“El proceso que iniciamos hoy no es ir al pasado, sino ver hacia el futuro. México cree que el TLCAN ha sido un gran éxito para todas las partes”, indicó.
Guajardo sostuvo no obstante que el acuerdo tiene espacio para su modernización, pero señaló que para que el proceso funcione debe dar dividendos para los tres países.
Por ello indicó que los objetivos de México son mejorar la competitividad de Norteamerica, avanzar hacia un sistema comercial más inclusivo, aprovechar la economía del siglo XXI para alentar la innovación y ofrecer certidumbre al comercio y la inversión.
En su turno, la canciller canadiense Chrystia Freeland, señaló que su país acoge con beneplácito la modernización del TLCAN porque busca hacerlo más “progresista” en temas como los derechos laborales, ambientales, de género y de los pueblos originales.
Freeland dijo que Canadá no ve a los déficits comerciales como el principal rasero del impacto del TLCAN y sostuvo que su país buscara protegerlo al acuerdo como motor del crecimiento y empleo.