Hoy, el escritor Eduardo Mendoza, tenía una obligada cita con su trayectoria literaria. Recogía de manos del rey Felipe VI el Premio Cervantes 2016, un galardón que bastante bien lo tiene merecido y que ha sido también muy apoyado por la crítica literaria.
Había gran expectación por lo que este perspicaz autor iba a comentar en su discurso y ya podemos transmitir una a una todas sus palabras. Con su sentido del humor tan característico, ya a la entrada dejó su primera «perla» humorística. Decía que iba acompañado de su familia, para que lo criticase, y también de sus amigos, para que le hicieran la ola… Si quieres saber el resto de sus palabras, acompáñanos con lo que queda de artículo.
Discurso de Eduardo Mendoza
Eduardo Mendoza es uno de esos autores que no aburren, que merecen ser escuchados, de los que sabes que en cuanto te despistes lo más mínimo habrá soltado una frase que bien podría enmarcarse o grabarse en una placa de esas para recordar siempre. Por lo que hemos querido ofreceros íntegramente su discurso, palabra por palabra… Juzguen vosotros mismos:
Tras repasar una a una las 4 veces que leyó el Quijote y los motivos que lo llevaron a ello, finalmente dijo:
«Mi conclusión es que don Quijote está realmente loco, pero sabe que lo está, y también sabe que los demás están cuerdos y, en consecuencia, le dejará hacer cualquier disparate que le pase por la cabeza. Es justo lo contrario de lo que me ocurre a mí. Yo creo ser un modelo de sensatez y creo que los demás están como una regadera, y por este motivo vivo perplejo, atemorizado y descontento de cómo va el mundo».
Después de esto, habló un poco sobre el cambio tan radical que estaba sufriendo la cultura en general:
«La tecnología ha cambiado el soporte de la famosa página en blanco, pero no ha eliminado el terror que suscita ni el esfuerzo que hace falta para acometerla».
Se despidió manifestando que seguirá siendo el que siempre ha sido: “Eduardo Mendoza, de profesión, sus labores”.