La preinscripción del Ministerio de Defensa en el Salón de la Enseñanza de Barcelona, que organiza la Feria y coordina la Generalidad, ya ha sido aceptada, así como una ampliación del espacio destinado al stand del Ejército, que en esta edición -a celebrar entre el 22 y el 26 de marzo-, contará con el triple de superficie a su disposición, cien metros cuadrados en lugar de la caseta de 32 metros cuadrados de la que disponía hasta el año pasado.
La Feria de Barcelona da por descontada la participación del Ejército, que justifica la petición de más espacio para evitar las colas que se producían habitualmente ante la "oficina" militar del Salón de la Enseñanza. A pesar de las presiones del Ayuntamiento y la Generalidad para que el Ministerio de Defensa no pudiera exponer las salidas académicas y profesionales del ámbito castrense, la organización del certamen ha garantizado su sitio al Ejército.
El año pasado, el Salón fue el escenario de una tensa situación cuando la alcaldesa Colau advirtió en tono desabrido a dos militares que preferiría que no estuvieran presentes. El encontronazo provocó un efecto llamada y el espacio dedicado al Ejército fue el stand estrella de la pasada edición.
La alcaldesa se tomó cumplida venganza con la prohibición de que tanto las Fuerzas Armadas como los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, incluidas la Guardia Urbana y los Mossos, participarán en el navideño Salón de la Infancia. Sin embargo, ha llegado tarde a la hora de impedir la inscripción del Ejército en este otro salón, donde participan universidades, empresas y centros educativos. En ese contexto, las salidas profesionales del Ministerio de Defensa gozan de un cierto atractivo en tanto que del 2013 al 2016 más de 250.000 personas –7.500 catalanes– han opositado para cubrir 18.000 empleos.