La Junta prevé ampliar su plantilla este año en 2.016 plazas, muy lejos de las 15.000 que los sindicatos calculan que generará la reducción de jornada

Realidad y ficción sobre la recuperación de las 35 horas

La entrada en vigor de la jornada de 35 horas, a partir de este lunes, para todo el personal de la administración general de la Junta de Andalucía supone el regreso a unas condiciones laborales que fueron modificadas con la crisis y las medidas de ahorro impuestas por el Gobierno del PP para controlar el déficit. Pero los sindicatos han intentado que esta «recuperación de un derecho», que tendrá un elevado coste presupuestario, no se perciba como un gesto insolidario y han puesto el acento en la oportunidad que la reducción horaria supone para la creación de empleo, concretamente, según los cálculos de UGT, de 15.000 nuevos puestos de trabajo en la administración andaluza.

Y, sin embargo, la previsión del Gobierno andaluz para el año 2017 en cuanto a la ampliación de sus plantillas se queda muy lejos de esa cifra. De hecho, la Ley de Presupuestos de la Junta para 2007, en su anexo de personal, contempla la creación de un total de 2.016 nuevos puestos de trabajo en la administración autonómica, de los cuales 1.081 se crearían en el sector sanitario, 813 en el sector docente y 122 en la administración general.

La Junta de Andalucía ha sacado en los últimos meses sucesivas ofertas de empleo público en los diferentes sectores que, sumadas, suponen la cobertura de 8.000 plazas de funcionario. Pero eso no significa que vaya a producirse un crecimiento neto del empleo público en esa misma cantidad, ya que esa oferta servirá en su mayor parte para dar estabilidad a las plantillas y reducir el peso del colectivo interino en cada uno de los cuerpos.

Previsiones

El único dato, por tanto, fiable con respecto a la previsión de crecimiento de las plantillas para dar cobertura a la reducción de jornada es el que aparece en los Presupuestos de la Junta para 2017, y que fija el objetivo en 2.016 nuevas plazas.

Ni siquiera trasladando ese mismo ritmo de creación de empleo a los ejercicios de 2018 y 2019 -a los que se extienden los efectos de la reducción de jornada- se alcanzarían las previsiones que vienen haciendo las organizaciones sindicales que, a la vista de los datos, constituyen antes la expresión de un deseo que un objetivo realista.

Y eso, a pesar de que el compromiso de la Junta ha sido el de que la recuperación de la jornada de 35 horas para sus 273.000 empleados se iba a aplicar sin afectar a la calidad de los servicios públicos.

A este respecto, el acuerdo alcanzado en su día entre el Ejecutivo autonómico y los sindicatos firmantes era contundente. Sin embargo, en el mismo no se llegó a cuantificar cómo se compensarían las horas de reducción ni cuánto personal sería necesario para que los servicios públicos no se vieran afectados. Pero sí se publicó una memoria económica que cuantifica el coste del pacto en términos presupuestarios, tanto en lo relativo a la implantación de la jornada de 35 horas como en otras mejoras laborales, como la recuperación los días de vacaciones que se habían visto reducidos igualmente por efecto de los recortes.

Así, en esa memoria económica, se estableció que el coste de la recuperación de las 35 horas sería de 255,5 millones de euros en tres ejercicios (2017, 2018 y 2019 ), 75,5 millones de euros en la Sanidad y 180 millones en la Enseñanza, de los cuales 105,5 se repercuten al presupuesto de 2017.

Hay que tener en cuenta que la aplicación de la reducción entre los docentes se realizará de forma gradual a partir del inicio del curso 2017-18 y durante dos cursos consecutivos (una hora de reducción del horario lectivo en cada curso, para pasar de las 20 a las 18 horas).

Pero, ¿están recogidas esas cantidades en el Presupuesto para 2017 aprobado por el Parlamento?

El gasto de Personal previsto para este ejercicio ha aumentado un 1,7% con respecto a 2016, lo que supone un total de 175 millones de euros extras.

Sin embargo, no todo ese dinero podrá ir a reequilibrar los servicios con la contratación de nuevos empleados. De hecho, en ese incremento se incluye también una subida salarial para toda la plantilla del 1%, condicionada a que así lo autorice el Gobierno de Mariano Rajoy, y que supondría un gasto de algo más de 102 millones de euros.

Equilibrios

En principio, por tanto, no parece que el aumento del presupuesto de Personal sea suficiente a priori para cubrir tanto la subida salarial como el coste de la recuperación de las 35 horas. Aunque en esa misma partida de personal hay algunos gastos que requerirán menos fondos que los dispuestos en 2016 -por ejemplo en lo que respecta a la integración del personal de los antiguos consorcios en el Servicio Andaluz de Empleo- , de forma que el balance puede finalmente quedar más o menos equilibrado.

Pero todos estas compensaciones y equilibrios presupuestarios son sólo papel cuando la realidad se impone. De hecho, lo presupuestado formalmente para gastos de personal resultó insuficiente tanto en 2015 y en 2016, lo que obligó al Gobierno de Susana Díaz a realizar diferentes modificaciones presupuestarias para cubrir el desfase. Así, por ejemplo, la Consejería de Educación necesitó en 2016 un total de 155 millones de euros más que los que tenía consignados sobre el papel para cubrir el pago de sus nóminas. Sin embargo, el aumento de presupuesto para 2017 se ha calculado sobre la partida que figuraba en el presupuesto de 2016 y que se reveló insuficiente. Eso significa que para 2017 hay consignados de partida 50 millones de euros menos que los que realmente se necesitaron en 2016. No resulta por tanto arriesgado aventurar que las previsiones de gasto serán de nuevo superadas por la realidad.