Después de contribuir con su trabajo al tercer triunfo de Chris Froome en el Criterium Dauphiné, Mikel Landa (13/12/1989, Álava) acabó de convencer al ciclista británico de su capacidad para estar a su lado y contribuir con su sacrificio para que el ciclista nacido en Nairobi (Kenia), pero de nacionalidad británica, vista de amarillo en los Campos Eliseos por tercera vez, después de las ediciones de 2013 y 2015. ¿Con qué animo acude a su primer Tour de Francia?
Con mucha ilusión de aprender, en una nueva carrera y de ser útil al equipo. El nuestro es un equipo que aspira a ganar con Froome y esto es importante para mí. . De ser el jefe de filas en el Giro a gregario de lujo en el Tour. ¿Le costará mucho cambiar el chip? No, no, porque ya estoy acostumbrado. Tuvo que abandonar antes de tiempo en el Giro por una gastroenteritis. ¿Qué aprendió de esa amarga experiencia? Que soy capaz de liderar un equipo. Me hizo mejor corredor de lo que era. ¿Algo que demostrar en el Tour? Sólo quiero estar con los mejores ciclistas del mundo, ser parte del equipo que disputará el Tour. Más que demostrar a los demás, me lo quiero demostrar a mí mismo. Su trabajo fue clave para que Froome conquistara el Dauphiné. ¿Le comentó algo en especial? Le gustó mucho la visión que tenía del final de las etapas en los momentos complicados, el apoyo que le di y mi forma de trabajar. ¿Cómo ve a su jefe de filas? Muy bien. Es un corredor que confía mucho en su capacidad y siempre transmite seguridad. ¿Cómo es Chris Froome? Es una persona muy humilde y accesible, a la que le puedes plantear cualquier duda. Un tipo normal, sin nada extraño. ¿Le ve como claro favorito? Sí, tiene muchas ganas de ganar su tercer Tour. Y usted se va a dejar la piel para que así sea, ¿no? Voy a dejarme la piel, hasta mi última gota de sudor, para que Froome gane el Tour. No voy a la carrera con ninguna otra idea. Pero, si en alguna etapa le dejan libertad, seguro que busca la gloria. Ganar una etapa en este Tour sería un sueño para mí si tuviera libertad. Voy con la idea clara de ayudar a Froome, pero si un día se da una ocasión… ¿Qué le parece el recorrido? Es bastante montañoso, aunque hay una etapa cronometrada de 37 kms. Va a ser más para escaladores que velocistas, con emoción hasta el último día. ¿Cuál es la clave para rendir bien a lo largo de tres semanas? Medir los esfuerzos y cuidar bien todos los detalles. Son muchos días en los que tienes que estar a tope. Cualquier despiste o fallo se paga muy caro. ¿A quiénes ve como principales rivales para Chris Froome? A Nairo Quintana, es el que más le ha puesto contra las cuerdas. Es el máximo rival. Ha hecho dos años segundo (los años que ganó Froome) y ha mejorado mucho en la lucha contra el crono. También ha mejorado mucho en las etapas cronometradas Thibaut Pinot. Después a Alberto Contador, es muy ambicioso y un corredorazo. ¿No cuenta con Vincenzo Nibali? Lo veo difícil después de la exigencia del Giro de Italia, donde ganó. Por cierto, ¿qué le parece que el Tour utilice cámaras térmicas para detectar motores en las bicicletas? Me parece bien todo lo que sea acabar con las trampas. Pero, la verdad, entre los corredores este tema no se comenta mucho, suena más a chiste. ¿Un deseo antes de iniciar el Tour? Tener salud y disfrutar todos los días. ¿Se llega a disfrutar de una dura etapa con tanto sacrificio? Sí, pese al sufrimiento, yo disfruto. Y, tr as el Tour, ¿Vuelta y Juegos?
Me gustaría estar en los Juegos Olímpicos. ¿La Vuelta? Ya veremos cuando acabe el Tour