La convocatoria de ayudas del Consell para 2013 dirigida a desempleados que se constituyan como trabajadores autónomos llega tarde y con importantes restricciones. A diferencia de otros ejercicios, las subvenciones para emprendedores -este año cuenta con una línea presupuestaria de 8,5 millones de euros- sólo podrán ser solicitadas por aquellos parados que inicien una actividad profesional y se den de alta en la Seguridad Social entre el 1 de junio y el 20 de septiembre; es decir, durante el período estival.

La conselleria de Economía, Industria, Turismo y Empleo deja fuera -tal como constatan los requisitos de la Orden 17/2013, de 5 de junio- dejará por tanto sin cobertura de fondos a aquellos desempleados valencianos que hayan comenzado su aventura profesional como trabajadores por cuenta propia en los cinco primeros meses del año. En 2012, cuando también publicó la citada orden a mediados del ejercicio, garantizó la retroactividad de las ayudas desde 1 de enero.

Según algunos economistas y asesores fiscales valencianos, esta importante restricción del período de tiempo para solicitar apoyo económico de la Generalitat -que todavía adeuda pagos de 2010 y se elevan a un total de 40 millones de euros- perjudicará a miles de parados que quieran convertirse en autónomos. Los meses veraniegos, según los expertos, son poco propicios para el inicio de los proyectos de emprendedores, que se centran sobre todo en actividades relacionas con el comercio. Darse de alta en el régimen de autónomos de la Seguridad Social requiere un desembolso de al menos 213,1 euros mensuales, cantidad económica poco asumible para la mayoría de los desempleados.

Recortes

La administración autonómica también contempla en 2013 un importante recorte en la cuantía de ayudas, ya que las mínimas disminuyen una media de 1.000 euros en todos los segmentos de población. Según el perfil de desempleado, las subvenciones oscilarán entre 4.000 y 9.000 euros en función del perfil del emprendedor. Hasta 2012 la cuantía mínima era de 5.000 euros. Uno de los requisitos exigibles para percibir la ayuda es cotizar a la Seguridad Social al menos tres años. Sin embargo, el retraso en los pagos del Consell por sus graves problemas de tesorería está generando el abandono de la actividad entre muchos emprendedores, algunos de los cuales han recibido un requerimiento de la Generalitat solicitando la devolución de unas ayudas que no han percibido.