El cuartel de la Guardia Civil de Burriana acogió ayer la presentación del escuadrón de ocho caballistas, proveniente del Grupo de Reserva y Seguridad de Valdemoro, que estará patrullando en el ámbito rural durante este mes de mayo en las provincias de Valencia y Castelló, a la que se sumará una segunda unidad a partir del día 15. La partida del Millars (la Plana Baixa) será la base de este escuadrón de caballería, donde se quedarán los caballos. Esta unidad, que realizará las tareas de vigilancia en el último tramo de la cosecha de cítricos, tiene como objetivo dar tranquilidad a los agricultores de la zona por los robos de herramientas y casas de campo. En Alicante no patrullarán porque, según la Delegación del Gobierno, "la incidencia de los robos es allí menor".

La delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León, fue la encargada de presentar el escuadrón de caballería de la Guardia Civil, que estará acompañado por la unidad de helicópteros, que no sólo vigilará desde el aire el ámbito rural, sino que se utilizará para trasladar a agentes "con mayor rapidez, para que estén en los puntos conflictivos en breve".

La primera quincena de mayo se incorpora una unidad compuesta por un sargento, un cabo, siete guardias civiles y ocho caballos, que patrullarán en la comarca de la Plana Baixa. Sánchez de León explicó que "el consejo agrario de Burrian pidió un refuerzo de la vigilancia y la respuesta ha sido inmediata", aunque reconoció que se trata de "acciones puntuales". En este sentido, la delegada del Gobierno apuntó que "el servicio se limitará a la época de cosecha, y esta escuadra es de apoyo puntual, ya que el número de efectivos es limitado y actúa a nivel nacional".

Además, a partir del 15 de mayo, llegará otra unidad con más efectivos, compuesta por un sargento, dos cabos, quince guardias civiles y dieciocho caballos, que sustituirán a la actual, para ampliar el radio de vigilancia "en la provincia de Valencia". Al escuadrón se sumarán los vehículos y el personal que se ocupa del mantenimiento y transporte de los equipos. Alicante, de momento, se queda fuera al tener menos incidencia de robos.

Por su parte, el alcalde de Burriana, José Ramón Calpe, insistió en que el consejo agrario pidió mayor vigilancia porque aunque"el número de robos de cosecha ha disminuido en número, la inseguridad en el campo se ha incrementado al producirse el desmantelamiento de instalaciones de riego, el robo de herramientas o el saqueo en casas de campo". "Los agricultores nos insisten en que no era cuestión de levantar la guardia ahora, sino que el final de la cosecha también se tenía que atender porque llegarían más problemas", apuntó el alcalde.

La primera unidad que operará durante esta primera quincena la componen 1 sargento, 1 cabo, 7 guardias civiles y 8 caballos. Las dos unidades de la segunda quincena del mes estarán compuestas por 1 sargento, 2 cabos, 15 guardias civiles y 18 caballos.